En la Biblia (Antiguo y Nuevo Testamento) como Palabra inspirada por Dios, única base y medida de la doctrina, la fe y la vida.
En un Dios trino:
En Dios Padre Creador del cielo y de la tierra.
En Dios Hijo Jesucristo, en su encarnación, su vida sin pecado, sus sufrimientos, su muerte redentora en la cruz, su resurrección, su ascensión y su segunda venida.
En Dios Espíritu Santo y su obra en el hombre para llevarlo al arrepentimiento (reconocimiento y rechazo del propio pecado), a la conversión (entrega a Dios), al nuevo nacimiento (recepción del Espíritu Santo) y a la santificación (conducta divinamente renovada).
En la corrupción y perdición de todo ser humano, a causa de la caída original, y en su salvación únicamente por la fe en la Divina Obra Redentora cumplida por Jesucristo.
En la Comunión por medio del Espíritu Santo con Dios nuestro Padre, con Jesucristo nuestro Señor y con todas las personas nacidas de nuevo.
En la Segunda Venida de Jesucristo para arrebatar a los suyos.
En el Juicio Final, en la Vida Eterna en comunión con Dios de los redimidos, y en la damnación eterna de todos los que rechazaron a Jesucristo como Salvador de ellos.